Si tienes dudas sobre la salud geoambiental en tu lugar de residencia, donde trabajas o donde estás un cierto tiempo, responde a estas preguntas, y si son afirmativas varias de ellas seguramente necesitarás realizar ciertos cambios. ¿Tienes un sueño inquieto? ¿Te levantas con sensación de no haber descansado? ¿Tienes pesadillas, hablas en sueños? ¿Te sientes peor (o mejor) desde que te mudaste de casa? ¿Notas algún cambio en tu estado físico o en tu estado de ánimo a raíz de un cambio de domicilio? ¿Notas que duermes considerablemente mejor cuando sales de vacaciones? ¿Tu hijo tiene episodios de sonambulismo o pesadillas mientras duerme? ¿Tiende a acurrucarse siempre en la misma zona de la cama? ¿Tienes cansancio crónico o, en general, sensación de falta de energía y desvitalización? ¿Tienes dolores de cabeza frecuentes y tu médico no los atribuye a nada concreto? ¿Tienes algún tipo de síntoma o patología que no mejora con los tratamientos médicos, o alguna enfermedad recurrente que no acaba de curar? ¿Has notado que las plantas en tu casa suelen decaer o marchitarse en alguna zona concreta, mientras que en otras no? ¿Hay en tu casa humedades o grietas cuya causa no has podido llegar a averiguar? ¿Tienes suelos de gres en tu hogar? ¿Ventilas a diario tu casa? ¿En tu mesilla de noche hay aparatos eléctricos, como un radio-reloj despertador o un teléfono inalámbrico? ¿Duermes con el teléfono móvil cargándose en tu mesilla de noche? ¿Hablas muchas horas al día con el móvil pegado a tu oreja? ¿En tu trabajo pasas varias horas al día con un teléfono- diadema inalámbrico? ¿Llevas tu móvil siempre con el wifi y el bluetooth conectados? ¿Tienes un router wifi en tu casa y lo tienes siempre encendido? ¿En tu casa se capta la señal wifi de los routers de tus vecinos? ¿Hay cobertura wifi en tu dormitorio? ¿Tienes la cocina al lado de tu dormitorio? En este caso, ¿hay algún tipo de electrodoméstico, como horno, caldera, lavadora o lavavajillas, en la misma pared que la cabecera de tu cama? ¿Hay antenas de telefonía móvil en el entorno cercano a tu casa? ¿Hay torres de alta o media tensión en el entorno cercano a tu casa? ¿Hay algún transformador urbano en los bajos de tu edificio o cerca? DECALOGO DE SALUD GEOAMBIENTAL La salud geoambiental es una cuestión de higiene y de hábitos. Conocer la naturaleza de las radiaciones que nos rodean y su funcionamiento nos ayudará a protegernos mejor de sus efectos nocivos. Esto es especialmente importante en espacios donde viven personas que pueden ser más vulnerables, como niños, mujeres embarazadas, personas mayores, o pacientes con algún tipo de enfermedad. Para mejorar nuestro bienestar y aumentar nuestra calidad de vida, basta con tener en cuenta varios consejos básicos referentes a la calidad de nuestro entorno, tanto en el hogar como en la oficina. 1. Alta permanencia. Evita situar tu lugar de descanso o de trabajo sobre zonas con alteraciones geofísicas, que alteran los campos magnéticos naturales en la superficie, y provocan inestabilidad e intensa radiación terrestre. Los lugares donde pasas más horas al día deben estar libres de radiaciones naturales. 2. Descanso. No coloques en tu mesilla de noche aparatos eléctricos, como radio-despertadores, lámparas halógenas con transformador o teléfonos inalámbricos. No pongas el móvil a cargar al lado de tu cama. Evita los colchones de muelles y los somieres con piezas ferromagnéticas. 3. Móviles. Al hablar por el teléfono móvil, hazlo con el manos libres; si evitas colocarte el aparato al lado del cerebro, estarás protegiéndote de sus radiaciones. Conecta el Bluetooth o el WiFi sólo cuando lo necesites. Procura que los niños no usen los móviles. 4. Electrodomésticos. La lavadora, microondas, horno, caldera, cocinas de inducción o vitrocerámica no deben estar en la pared contigua a la cabecera de tu cama. Aun estando apagados, emiten radiaciones que traspasan la pared. 5. Instalación eléctrica. Comprueba que el cableado no emite más radiaciones de lo estrictamente necesario y que las tomas de tierra funcionan bien. 6. Tecnologías inalámbricas. Las tecnologías sin cables, como los teléfonos inalámbricos DECT o los routers WiFi, saturan nuestro entorno de radiaciones de altas frecuencias. Elige preferiblemente tecnologías con cable, y recurre a las tecnologías inalámbricas sólo si es inevitable, siempre colocando las fuentes de las radiaciones lejos de los lugares de alta permanencia. 7. Gas radón. Cuando decores tu casa, evita el uso de basaltos o granitos, algunas cerámicas y ciertos tipos de gres, que pueden ser fuente de gas radón; es radiactivo y puede causar cáncer de pulmón. Si el inmueble tiene estos materiales, asegúrate de que hay una buena ventilación. 8. Antenas y cables. Antes de adquirir una nueva vivienda u oficina, vigila que no haya cerca antenas de telecomunicaciones o de teléfonos móviles, líneas de alta tensión, tendido eléctrico o transformadores urbanos. 9. Electricidad estática. Evita el uso excesivo de materiales sintéticos: moquetas, tejidos, encimeras de cocina, mobiliario, etc. Coloca humidificadores y utiliza preferentemente materiales naturales. 10. Edificios inteligentes. Los lugares cerrados con ventanas impracticables, suelos o techos técnicos y aires acondicionados son caldo de cultivo de bacterias y hongos por el aumento de la ionización positiva del aire. Hace falta una buena ventilación y utilizar ionizadores para mejorar la calidad del ambiente. Fuente y más información: www.saludgeoambiental.org